De nueva cuenta este sábado como se hace cada año desde 1996, se atrasó el reloj una hora a partir de las dos de la madrugada, para dar paso al horario de invierno y recuperar así 60 minutos que se “adelantaron” el primer domingo de abril, al entrar en vigor el horario de verano..
Para algunos porteños, yucatecos y mexicanos, el ajuste de los relojes implicará una hora más de sueño o fiesta, pero para otros, como policías de guardia, vigilantes y gente que labora por las noches, representan una hora más de labores, de manera que el cambio de horario genera reacciones diversas.
Y como ya es costumbre, las autoridades con días de anticipación recomendaron a través de diversos medios, para que este sábado se atrase una hora los relojes antes de acostarse a dormir, a fin de evitar contratiempos el domingo en la mañana.
El ajuste de tiempo según dice el gobierno en folletos entregados para enterarse del cambio de horario, se lleva a cabo en los tres países de América del Norte, Canadá, Estados Unidos y México, con la idea de mantener una correlación de husos horarios y no afecte tanto entre las actividades de diversa índole que se efectúan.
En México se aplican los cambios de horario en tres zonas: la del Centro, que agrupa a 26 estados, entre ellos Yucatán; la del Pacífico, que corresponde a Baja California (con la que hay 2 horas de diferencia) y la de la Montaña, que incluye a cinco estados del Noroeste (una hora).
El gobierno dice que el cambio de horario permite aprovechar mejor la luz solar y ahorrar en consumo de energía y el uso de combustibles para generar electricidad.
Sin embargo los porteños dicen que no es verdad ya que se paga lo mismo o más por consumo de luz que con el otro horario ya que la Comisión Federal de Electricidad retira el subsidio en el recibo de luz.
Y aunque mucha gente está feliz por que se les va a regresar la hora, y el día rinde más, el problema viene cuando se acorta que sucede en el primer domingo de abril, ya que es cuando se “roba” una hora a los porteñós, yucatecos y mexicanos en general.
Y aunque investigadores de diversas dependencias dicen que el cambio de hora no afecta el reloj biológico del ser humano, mucha gente no está de acuerdo con el, pero lo acepta por que no les queda de otra.
Así que este domingo tuvimos una hora de más.
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