jueves, 4 de febrero de 2010

TU TERNURA MOLOTOV Y LAS HUIRAS DE LA SIERRA PAPAKAL


Este fin de semana es la ocasión especial que el Instituto de Cultura de Yucatán ha preparado para que el público yucateco pueda apreciar el trabajo teatral que realizan los artistas locales con la presentación de las obras: Tu Ternura Molotov mañana viernes 5 y sábado 6 de febrero, a las 21:00 horas y Las Huiras de la Sierra Papakal a las 20:00 horas, el domingo 7 de febrero. Ambas obras se llevarán a cabo en el Teatro Daniel Ayala Pérez. Los boletos ya están a la venta.
La compañía Saás Tun da vida a Las Huiras de la Sierra Papakal, una obra de teatro regional escrita, dirigida y actuada por Concepción León con la participación de Salomé Sansores Chepita, Andrea Herrera y Darinka Velez Enríquez; y Murmurante Teatro Producciones presenta la comedia Tu Ternura Molotov, original de Gustavo Ott, protagonizada por Ariadna Medina y Sebastián Liera bajo la dirección de Juan de Dios Rath.
Tu Ternura Molotov es una comedia incisiva, implacable, construida sobre diálogos irónicos en los que se abordan con sarcasmo temas polémicos como el racismo, la religión y la xenofobia. La obra consigue, con admirable naturalidad, despertar la sensibilidad estética del espectador; incluso de aquel que no sea consciente que vivimos en tiempos de decadencia. Nos presenta la historia de Daniel y Victoria, el matrimonio protagónico, a los cuales no les importa tener sexo, sino concebir al primogénito varón que perpetúe los privilegios de su clase. Lo trascendente no es una omisión del pasado, sino que ésta pueda afectar un sólido y bien remunerado futuro. El relativismo moral ante todo.
Las Huiras de la Sierra Papakal, es un espectáculo de teatro regional con comedia localista sin chistes obligados, un teatro de argumento con situaciones cómicas que hacen reír y a la vez reflexionar al espectador. Nos narra la historia de un par de mestizas que leen en el periódico (cualquiera de esos periódicos que ahora abundan en nuestro estado y que tienden a agrandar la gravedad de los casos y a mostrar las fotografías menos favorecedoras de las víctimas), que una amiga suya está muy grave, en los últimos días de su vida. Temerosas de este hecho, acuden a visitarla a su casa y al verla postrada en su hamaca emprenden una suerte de curaciones naturales, aprendidas de la infancia. Ante la inconsciencia de la mujer enferma, ellas aplican todos los remedios enseñados por las abuelas: el uso de la naranja agria, las frotaciones con mentol, la cura de la viruela con semillas de achiote, el bálsamo del Dr. Castro que todo lo cura. ¿Será que la alivian o la dejan peor?

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