La Dirección de Averiguaciones Previas de la Fiscalía General del Estado, consignó hoy al CERESO a EDUARDO DE LA CRUZ TUN BACAB (a) “Huado”, como probable responsable del delito de homicidio calificado, cometido en la persona de quien en vida respondió al nombre de Adolfo Ángel González Acosta y, por el delito de corrupción de menores e incapaces, denunciado por la representación social.
Según la averiguación previa 530/20ª/, los involucrados se hallaban en un predio ubicado en la calle 4 entre 21 y 23 de la colonia Blanca Rosa de Conkal, en donde laboraban como albañiles en una construcción, desde hacía un tiempo.
Según las indagatorias los hechos se suscitaron después de que los empleados y el adolescente J.T.M., detuvieron sus labores a las cinco de la tarde, para comenzar a ingerir bebidas embriagantes, aunque poco después, el ahora detenido decidió dejar de tomar porque estaba cansado y se fue a dormir a una hamaca, ocasionando el enojo de Adolfo Ángel, quien presuntamente lo instaba constantemente a levantarse para seguir bebiendo.
Después de ir a comprar más cervezas, para la madrugada del día siguiente, Adolfo Ángel acudió a donde dormía su compañero de labores y, exigiéndole que se levantara, lo agarró por la camisa y lo comenzó golpear, levantándolo y arrojándolo al piso, en donde éste se lesionó con unos pedazos de cristal.
Aún en el piso, Tun Bacab se apoderó de un pedazo de cabilla que estaba tirada y cuando el hoy occiso se aproximó, le clavó el objeto punzocortante a la altura de la vena y arteria femoral (muslo izquierdo), ocasionando una hemorragia que le hizo perder la vida.
De la necropsia de ley se determinó que el deceso fue a consecuencia de choque hipovolémico consecuente con perforación de la vena y arteria femoral del lado izquierdo.
Según la averiguación previa 530/20ª/, los involucrados se hallaban en un predio ubicado en la calle 4 entre 21 y 23 de la colonia Blanca Rosa de Conkal, en donde laboraban como albañiles en una construcción, desde hacía un tiempo.
Según las indagatorias los hechos se suscitaron después de que los empleados y el adolescente J.T.M., detuvieron sus labores a las cinco de la tarde, para comenzar a ingerir bebidas embriagantes, aunque poco después, el ahora detenido decidió dejar de tomar porque estaba cansado y se fue a dormir a una hamaca, ocasionando el enojo de Adolfo Ángel, quien presuntamente lo instaba constantemente a levantarse para seguir bebiendo.
Después de ir a comprar más cervezas, para la madrugada del día siguiente, Adolfo Ángel acudió a donde dormía su compañero de labores y, exigiéndole que se levantara, lo agarró por la camisa y lo comenzó golpear, levantándolo y arrojándolo al piso, en donde éste se lesionó con unos pedazos de cristal.
Aún en el piso, Tun Bacab se apoderó de un pedazo de cabilla que estaba tirada y cuando el hoy occiso se aproximó, le clavó el objeto punzocortante a la altura de la vena y arteria femoral (muslo izquierdo), ocasionando una hemorragia que le hizo perder la vida.
De la necropsia de ley se determinó que el deceso fue a consecuencia de choque hipovolémico consecuente con perforación de la vena y arteria femoral del lado izquierdo.
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