El zafarrancho suscitado este martes por la noche se debió a que se iba a detener a dos pepineros siendo
estos Andrés Magaña Jiménez y Olsen
Magaña Cetz, padre e hijo, los pijijs, a quien se liga con la captura de pepino
de mar, informaron familiares de los afectados.
Por ello es que llegaron a
puerto más de 20 unidades para tal fin y aunque se logró la detención de estos
de manera momentánea una turba de gente
impidió que estos sean llevados al Cereso.
Como dimos a saber, los vecinos
apoyados con piedras, palos y demás armas a su alcance, lograron hacer que se replieguen los a gentes de la ley, estos se vieron
obligados a sacar sus armas para disparar al aire, hacer tres disparos y replegar a la turba.
Este fallido operativo se dio
horas antes de que se dieran a saber los nombres de los beneficiados con los
permisos para la captura del pepino en el que se sabed hay muchos intereses de
por medio.
En el refuego se daño varias
patrullas municipales y estatales.
Después del malogrado operativo
los agentes de la ley se trasladaron al edificio de la PGR en la ciudad y se
retiraron del puerto poco antes de las 12 de la noche.
La zozobra entre los habitantes
del puerto se extendió varias horas y fue constate el ir y venir de la gente
y fue el comentario del día acemas de que los porteños hablaron sobre el ensañamiento de los funcionarios de
algunas dependencias en contra de solo algunos pepíneros y no lo hacen
extensivo a todos los “bandidos de cuello blanco” que tras pomposos apellidos
no son tocados ni con el pétalo de una rosa.
Aquí hay interés hasta de la
policía estatal dice José Verde pescador de la Caleta quien dice que se sabe
que es un secreto a voces el contubernio que hay entre esta y los pepineros
beneficiados del sistema pero estamos en México y no pasa nada y si pasa, no
pasa nada.
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