A pesar de que se habían levantado grandes expectativas con la llegada del crucero SS Oceanic, su estadía en el puerto pasó desapercibida ya que la nave llegó con poca gente y las ventas no fueron la que los prestadores de servicios esperaban.
Este crucero llegó con 440 pasajeros y de esta cantidad solamente permanecieron en el malecón unos 50 de estos siendo en su mayoría nipones.La nave atracó a las 5 de la mañana procedente de la Habana, Cuba y los paseantes empezaron a bajar a las 9 horas pero en mínima cantidad, por lo que se consideró la jornada mala, al grado de que para las 13 horas muchos artesanos ya habían levantado sus puestos pues no ameritaban su estancia las pocas ventas obtenidas según dijeron.
En el bulevar solo se halló a uno que otro grupo de gente paseando y no se vio mucho movimiento.
Para los rentadores de motos acuáticas, bananas, vendedores artesanos, masajistas y demás prestadores de servicios, el día fue pésimo a pesar de que tenían la esperanza de que se iba a vender algo.
Este crucero llegó con 440 pasajeros y de esta cantidad solamente permanecieron en el malecón unos 50 de estos siendo en su mayoría nipones.La nave atracó a las 5 de la mañana procedente de la Habana, Cuba y los paseantes empezaron a bajar a las 9 horas pero en mínima cantidad, por lo que se consideró la jornada mala, al grado de que para las 13 horas muchos artesanos ya habían levantado sus puestos pues no ameritaban su estancia las pocas ventas obtenidas según dijeron.
En el bulevar solo se halló a uno que otro grupo de gente paseando y no se vio mucho movimiento.
Para los rentadores de motos acuáticas, bananas, vendedores artesanos, masajistas y demás prestadores de servicios, el día fue pésimo a pesar de que tenían la esperanza de que se iba a vender algo.
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