Los diputados federales del PRI ratificaron que las siete camionetas para su uso particular en la capital del país fueron adquiridas con recursos propios, sin ningún peso proveniente del erario público como malintencionadamente pretenden hacer creer sus similares del PAN.
Por el contrario, señalaron, quienes sí gozan de automóviles, combustible y choferes pagados con recursos del erario público son los legisladores federales del PAN, pues cuando llegan a la capital del país son transportados en unidades que son propiedad de la Cámara Baja.
¿Con qué autoridad moral cuestionan –sin fundamento alguno- la compra de camionetas pagadas con recursos propios cuando ellos, sin rubor alguno, disponen de bienes públicos para su exclusivo uso personal?, plantearon los legisladores del tricolor.
Además de todo lo anterior, indicaron, Beatriz Zavala Peniche disfruta de prebendas como senadora y hasta se da el lujo de “ordeñar” recursos de dependencias federales de Yucatán para utilizarlos con fines partidistas.
El bloque de diputados federales del PRI afirmó que las infamias del PAN obedecen a una estrategia meramente partidista a sabiendas –según reconocen sus mismos ex dirigentes estatales- que hoy más que nunca están a punto de perder la alcaldía de Mérida.
Por última ocasión, para no prestarse a la estrategia panista de convertir la calumnia e infamia en protagonistas del acontecer diario de los yucatecos, los legisladores del tricolor se manifestaron dispuestos a encarar la auditoría de cualquier autoridad porque la compra de dichos vehículos fue legal de principio a fin.
Asentaron lo anterior los diputados federales Rolando Zapata Bello, Jorge Carlos Ramírez Marín, Eric Rubio Barthell, Enrique Castillo Ruz, Felipe Cervera Hernández, Liborio Vidal Aguilar y Angélica Araujo Lara.
De nueva cuenta, explicaron que en septiembre pasado los siete diputados federales del PRI acordaron realizar una compra de vehículos para su uso personal en el Distrito Federal en virtud de la necesidad de contar con un medio de transporte por la naturaleza de sus funciones.
Afirmaron que cada uno de los siete vehículos están siendo pagados por los diputados federales del PRI con dinero propio, hecho que puede ser comprobable ante la autoridad que competa.
“Por supuesto, nos ponemos a disposición de las autoridades de auditoría para cualquier revisión, pero lo que no haremos es prestarnos a un juego donde la difamación y la calumnia se vuelvan protagonistas”, aseguraron.
Por ello, ante las calumnias del PAN, dejaron claro que no hay razón para devolver ni una sola de las camionetas adquiridas con recursos propios.
En el momento que sea oportuno, y ante la autoridad pertinente, existe la plena de disposición de comprobar la forma en que se adquirieron las unidades, añadieron.
Dijeron que constituye una pena que el diputado del PAN, Daniel Ávila Ruiz, utilice una comisión para perseguir objetivos político- partidistas; sin embargo, en el momento que así lo considere, lo anteriormente afirmado se puede corroborar ante cualquier autoridad.
“Pero le queremos transmitir al diputado Ávila Ruiz que los diputados federales del PRI sí sabremos trabajar en la Comisión de Vigilancia de la Cámara de Diputados”, anticiparon.
Los legisladores federales del PRI recordaron que la Representación de Yucatán en la Ciudad de México, emitió una postura sobre el caso el pasado jueves, por lo que pidieron a sus similares del PAN que viertan comentarios apegados a la realidad.
Asimismo, refutaron “argumentos infantiles” con relación al supuesto bloqueo de la página electrónica de un medio de comunicación nacional, cuando la difusión de una calumnia bien orquestada estuvo presente en numerosos portales.
“Qué pena que los diputados federales del PAN y su dirigencia distraigan el intenso trabajo legislativo que realizamos, sobre todo en momentos que el país necesita más que nunca de nuestro compromiso para salir adelante”, concluyeron.
Por el contrario, señalaron, quienes sí gozan de automóviles, combustible y choferes pagados con recursos del erario público son los legisladores federales del PAN, pues cuando llegan a la capital del país son transportados en unidades que son propiedad de la Cámara Baja.
¿Con qué autoridad moral cuestionan –sin fundamento alguno- la compra de camionetas pagadas con recursos propios cuando ellos, sin rubor alguno, disponen de bienes públicos para su exclusivo uso personal?, plantearon los legisladores del tricolor.
Además de todo lo anterior, indicaron, Beatriz Zavala Peniche disfruta de prebendas como senadora y hasta se da el lujo de “ordeñar” recursos de dependencias federales de Yucatán para utilizarlos con fines partidistas.
El bloque de diputados federales del PRI afirmó que las infamias del PAN obedecen a una estrategia meramente partidista a sabiendas –según reconocen sus mismos ex dirigentes estatales- que hoy más que nunca están a punto de perder la alcaldía de Mérida.
Por última ocasión, para no prestarse a la estrategia panista de convertir la calumnia e infamia en protagonistas del acontecer diario de los yucatecos, los legisladores del tricolor se manifestaron dispuestos a encarar la auditoría de cualquier autoridad porque la compra de dichos vehículos fue legal de principio a fin.
Asentaron lo anterior los diputados federales Rolando Zapata Bello, Jorge Carlos Ramírez Marín, Eric Rubio Barthell, Enrique Castillo Ruz, Felipe Cervera Hernández, Liborio Vidal Aguilar y Angélica Araujo Lara.
De nueva cuenta, explicaron que en septiembre pasado los siete diputados federales del PRI acordaron realizar una compra de vehículos para su uso personal en el Distrito Federal en virtud de la necesidad de contar con un medio de transporte por la naturaleza de sus funciones.
Afirmaron que cada uno de los siete vehículos están siendo pagados por los diputados federales del PRI con dinero propio, hecho que puede ser comprobable ante la autoridad que competa.
“Por supuesto, nos ponemos a disposición de las autoridades de auditoría para cualquier revisión, pero lo que no haremos es prestarnos a un juego donde la difamación y la calumnia se vuelvan protagonistas”, aseguraron.
Por ello, ante las calumnias del PAN, dejaron claro que no hay razón para devolver ni una sola de las camionetas adquiridas con recursos propios.
En el momento que sea oportuno, y ante la autoridad pertinente, existe la plena de disposición de comprobar la forma en que se adquirieron las unidades, añadieron.
Dijeron que constituye una pena que el diputado del PAN, Daniel Ávila Ruiz, utilice una comisión para perseguir objetivos político- partidistas; sin embargo, en el momento que así lo considere, lo anteriormente afirmado se puede corroborar ante cualquier autoridad.
“Pero le queremos transmitir al diputado Ávila Ruiz que los diputados federales del PRI sí sabremos trabajar en la Comisión de Vigilancia de la Cámara de Diputados”, anticiparon.
Los legisladores federales del PRI recordaron que la Representación de Yucatán en la Ciudad de México, emitió una postura sobre el caso el pasado jueves, por lo que pidieron a sus similares del PAN que viertan comentarios apegados a la realidad.
Asimismo, refutaron “argumentos infantiles” con relación al supuesto bloqueo de la página electrónica de un medio de comunicación nacional, cuando la difusión de una calumnia bien orquestada estuvo presente en numerosos portales.
“Qué pena que los diputados federales del PAN y su dirigencia distraigan el intenso trabajo legislativo que realizamos, sobre todo en momentos que el país necesita más que nunca de nuestro compromiso para salir adelante”, concluyeron.
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