Debemos ir más allá de establecer cuotas paritarias, lo que necesitamos es encontrar la representación igualitaria entre hombres y mujeres en todas las instituciones y organismos en donde se toman decisiones, sostuvo la senadora Rosa Adriana Díaz Lizama en la sesión solemne para conmemorar el 60o. aniversario del derecho del voto de la mujer en México.
Debemos generar, en un plazo aceptable, las medidas legales que permitan incorporar los principios de paridad de género, alternancia y rotación en la conformación de todos los cuerpos colegiados de tomas de decisiones de nuestro país --añadió la legisladora federal, ante senadores e invitados especiales.
frente a la senadora yucateca se encontraban Ivonne Ortega Pacheco, secretaria general del PRI; la ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación Olga Sánchez Cordero; Ana Güezmes, representante de ONU-Mujeres en México, y el presidente nacional del PAN, Gustavo Madero Muñoz, entre otros.
Estamos obligados, y a ello les convoco --solicitó la senadora yucateca--, para generar las condiciones legales que permitan al Estado mexicano asegurar un país pleno de derechos e igualdades.
Seguiremos luchando y trabajando para que integremos plenamente la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres en todos los sectores del país.
Esta generación de mujeres seguirá impulsando un México más igualitario, más justo y más equitativo.
ORGULLOSAMENTE YUCATÁN
Al hacer un recuento del derecho del voto para las mujeres, Rosa Adriana Díaz subrayó que esta lucha empezó en las entidades federativas: "Fueron San Luis Potosí y, orgullosamente, Yucatán, los primeros estados que otorgaron en 1923 el derecho al voto a la mujer antes que en la legislación federal".
Hace ya 60 años, justamente un día como hoy, 17 de octubre de 1953, fue publicado en el Diario Oficial de la Federación el nuevo texto constitucional que establecía: son ciudadanos de la República los varones y mujeres que teniendo la calidad de mexicanos reúnan, además, los siguientes requisitos: primero, haber cumplido 18 años, siendo casado, o 21 si no lo son, y segundo, tener un modo honesto de vivir.
Con esta disposición, las mujeres, al obtener la ciudadanía plena, adquirieron derechos y libertades básicas de todo Estado democrático, y se reconoce el derecho a votar y a ser votado.
Rosa Adriana Díaz destacó también que la lucha de la mujer por alcanzar sus derechos a plenitud ha pasado significativamente por el Poder Legislativo.
En este contexto, debemos resaltar que en la Cámara de Diputados y en la Cámara de Senadores se han presentado diversos proyectos que buscan atender la perspectiva de género en las candidaturas de los partidos políticos.
A la reciente iniciativa de reformas al Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales, presentada por el Presidente de la República, no podríamos estar en contra, ya que todas de alguna manera tienen como objetivo redimensionar la actividad de las mujeres en todas las áreas de la vida política nacional.
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