A pesar del mal tiempo que trajo consigo el norte que afecta la costa yucateca, este martes las playas del puerto lucieron atestadas de gente en su mayoría turismo local y nacional que esta de paseo en la entidad.
En un recorrido efectuado se observó que a pesar de que el mar está picado por efectos de los vientos, a la gente esto no le importó y muchos de ellos se metieron a las playas a nadar, y otros se dedicaron a jugar en al arena con sus hijos o a tomar parte en juegos playeros.
Otra parte considerable de paseantes se dedicó a recorrer la ciudad y con mas lugares de interés de la ciudad.
En la playa, por la cantidad de paseantes, elementos de la Armada de México, se dedicaron a recorrer el bulevar para salvaguardar a la integridad física de los bañistas.
Otros más les daban de comer a las gaviotas y los que tenían dinero iba a los restaurantes y la gente que llegó de fuera comía sus vianda ya elaboradas en casa para que su estancia en el puerto sea económica.
Otra parte de paseantes se dedicaron a pasear en el malecón y dormir en la arena o jugar, y algunos se dio su masaje peto no se pudo pasear en banana, por los fuertes vientos del norte, por lo que el día fue malo para la gente dedicad a la renta de estos atractivos.
Mientras que los artesanos, masajistas, vendedores, restauranteros, y rentadores de motos estuvieron de plácemes ya que les fue my bien pues este turismo el nacional y el local si compran y pagar el precio justo de los recuerdos que se llevan para sus familiares o amigos.
En un recorrido efectuado se observó que a pesar de que el mar está picado por efectos de los vientos, a la gente esto no le importó y muchos de ellos se metieron a las playas a nadar, y otros se dedicaron a jugar en al arena con sus hijos o a tomar parte en juegos playeros.
Otra parte considerable de paseantes se dedicó a recorrer la ciudad y con mas lugares de interés de la ciudad.
En la playa, por la cantidad de paseantes, elementos de la Armada de México, se dedicaron a recorrer el bulevar para salvaguardar a la integridad física de los bañistas.
Otros más les daban de comer a las gaviotas y los que tenían dinero iba a los restaurantes y la gente que llegó de fuera comía sus vianda ya elaboradas en casa para que su estancia en el puerto sea económica.
Otra parte de paseantes se dedicaron a pasear en el malecón y dormir en la arena o jugar, y algunos se dio su masaje peto no se pudo pasear en banana, por los fuertes vientos del norte, por lo que el día fue malo para la gente dedicad a la renta de estos atractivos.
Mientras que los artesanos, masajistas, vendedores, restauranteros, y rentadores de motos estuvieron de plácemes ya que les fue my bien pues este turismo el nacional y el local si compran y pagar el precio justo de los recuerdos que se llevan para sus familiares o amigos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario