La Presidenta y el director del DIF Municipal, Mercedes Recio Vera y Sergio Bates Angulo respectivamente, hicieron entrega de una cama individual a Alejandra Martina Méndez de 45 años, discapacitada porteña quien diariamente trabaja de sol a sol en el puerto de abrigo para solventar sus necesidades más básicas.
Será, Alejandra, quien se encuentra lisiada y en silla de ruedas a raíz de que fue arrollada por un auto en su niñez, actualmente reside en una pequeña vivienda de dos pieza a orillas de la “caleta” ubicada en la colonia Vicente Guerrero, una de las zonas con más alto índice de pobreza de este puerto.
Allí, con tan solo una hamaca, descansa sus heridas de las múltiples operaciones en la columna a las que se ha tenido que someter.
A pesar de su discapacidad, sus carencias le recuerdan en todo momento que debe trabajar para poder sobrevivir y por ello se desempeña como “gaviotera” en el puerto, (se dedica a lavar tablas de las neveras de los barcos) actividad para la cual tiene que desplazarse a diario por sí misma por más de 3 kilómetros en su silla de ruedas.
Por ello las autoridades del DIF Municipal también se comprometieron a gestionarle una solicitud para la obtención de una motocicleta adaptada, aparato que le ayudará en gran medida para realizar su trabajo y que mejorará notablemente su calidad de vida.La beneficiaria, agradeció fervientemente a la dependencia por preocuparse en todo momento por su bien estar y por brindarle la cama que la ayudará a descansar mejor, así como también a toda la gente que la ha apoyado económica y moralmente.
Será, Alejandra, quien se encuentra lisiada y en silla de ruedas a raíz de que fue arrollada por un auto en su niñez, actualmente reside en una pequeña vivienda de dos pieza a orillas de la “caleta” ubicada en la colonia Vicente Guerrero, una de las zonas con más alto índice de pobreza de este puerto.
Allí, con tan solo una hamaca, descansa sus heridas de las múltiples operaciones en la columna a las que se ha tenido que someter.
A pesar de su discapacidad, sus carencias le recuerdan en todo momento que debe trabajar para poder sobrevivir y por ello se desempeña como “gaviotera” en el puerto, (se dedica a lavar tablas de las neveras de los barcos) actividad para la cual tiene que desplazarse a diario por sí misma por más de 3 kilómetros en su silla de ruedas.
Por ello las autoridades del DIF Municipal también se comprometieron a gestionarle una solicitud para la obtención de una motocicleta adaptada, aparato que le ayudará en gran medida para realizar su trabajo y que mejorará notablemente su calidad de vida.La beneficiaria, agradeció fervientemente a la dependencia por preocuparse en todo momento por su bien estar y por brindarle la cama que la ayudará a descansar mejor, así como también a toda la gente que la ha apoyado económica y moralmente.
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