Un total de 32 calles del Centro Histórico de Mérida experimentarán la transición del asfalto al concreto estampado, con los trabajos de recuperación y embellecimiento que realiza el Gobierno del Estado.
Para no suspender el tránsito vehicular al mismo tiempo, el trabajo se divide en diversas etapas hasta abarcar todas las calles de las ocho manzanas que forman el cuadrángulo denominado “núcleo central” alrededor de la Plaza Principal.
Este núcleo central está delimitado por las calles 59 al norte, 58 al oriente, 65 al sur y 64 al poniente de la Plaza. Las calles dentro de esta zona tendrán nuevo pavimento, banquetas, cableado subterráneo y pintura e iluminación de fachadas.
Hoy, a partir de las seis de la tarde, comenzó el vertido del material denominado “relleno fluido” sobre la calle 58 cuyo pavimento fue retirado en días pasados para trabajar en las instalaciones eléctricas e hidráulicas.
Grandes "ollas" de concreto comenzaron a entrar en esas calles para dejar su carga y conformar la base sobre la cual posteriormente se colará el nuevo pavimento estampado.
Este trabajo es supervisado personalmente por el secretario de Obras Públicas del Gobierno estatal, Jorge Arjona Puerto, quien ayer realizó un recorrido por las obras sobre la calle 58. En el trayecto ningún comerciante externó queja alguna sobre los trabajos.
Arjona Puerto informó que el relleno fluido es un material que permite ahorrar tiempo de construcción y la entrada de más maquinaria pesada a esta zona de comercios y de alta concentración vehicular y peatonal.
“Con ello se espera reducir el tiempo de construcción de una calle y al mismo tiempo se evitará la generación de ruido, polvo y riesgos para los peatones por la operación de maquinaria que incluye volquetes, motoconformadoras, pipas de riego y aplanadoras, entre otros equipos”, dijo.
El relleno fluido, que es una especie de concreto muy líquido, se endurece en 24 horas, en vez de una semana de trabajos que implican el empleo de volquetes para descargar toneladas de “sascab”, luego extenderlo con motoniveladoras y posteriormente compactarlo con aplanadoras y riego de pipas para crear la base sobre la cual se colocará el concreto estampado.
Explicó que, por su característica líquida, la principal ventaja del relleno fluido es alcanzar por sí solo una auto nivelación por gravedad y al endurecerse crea la superficie de base, lista para recibir el nuevo pavimento, lo que evita un proceso más tardado.
La empresa Cemex reporta en su página oficial que el relleno fluido agiliza el programa de obra “reduciendo los tiempos, la mano de obra, requiere menos supervisión y permite una rápida apertura al tráfico”.
Para no suspender el tránsito vehicular al mismo tiempo, el trabajo se divide en diversas etapas hasta abarcar todas las calles de las ocho manzanas que forman el cuadrángulo denominado “núcleo central” alrededor de la Plaza Principal.
Este núcleo central está delimitado por las calles 59 al norte, 58 al oriente, 65 al sur y 64 al poniente de la Plaza. Las calles dentro de esta zona tendrán nuevo pavimento, banquetas, cableado subterráneo y pintura e iluminación de fachadas.
Hoy, a partir de las seis de la tarde, comenzó el vertido del material denominado “relleno fluido” sobre la calle 58 cuyo pavimento fue retirado en días pasados para trabajar en las instalaciones eléctricas e hidráulicas.
Grandes "ollas" de concreto comenzaron a entrar en esas calles para dejar su carga y conformar la base sobre la cual posteriormente se colará el nuevo pavimento estampado.
Este trabajo es supervisado personalmente por el secretario de Obras Públicas del Gobierno estatal, Jorge Arjona Puerto, quien ayer realizó un recorrido por las obras sobre la calle 58. En el trayecto ningún comerciante externó queja alguna sobre los trabajos.
Arjona Puerto informó que el relleno fluido es un material que permite ahorrar tiempo de construcción y la entrada de más maquinaria pesada a esta zona de comercios y de alta concentración vehicular y peatonal.
“Con ello se espera reducir el tiempo de construcción de una calle y al mismo tiempo se evitará la generación de ruido, polvo y riesgos para los peatones por la operación de maquinaria que incluye volquetes, motoconformadoras, pipas de riego y aplanadoras, entre otros equipos”, dijo.
El relleno fluido, que es una especie de concreto muy líquido, se endurece en 24 horas, en vez de una semana de trabajos que implican el empleo de volquetes para descargar toneladas de “sascab”, luego extenderlo con motoniveladoras y posteriormente compactarlo con aplanadoras y riego de pipas para crear la base sobre la cual se colocará el concreto estampado.
Explicó que, por su característica líquida, la principal ventaja del relleno fluido es alcanzar por sí solo una auto nivelación por gravedad y al endurecerse crea la superficie de base, lista para recibir el nuevo pavimento, lo que evita un proceso más tardado.
La empresa Cemex reporta en su página oficial que el relleno fluido agiliza el programa de obra “reduciendo los tiempos, la mano de obra, requiere menos supervisión y permite una rápida apertura al tráfico”.
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