miércoles, 21 de diciembre de 2011

Preparan la desaparición de postes y cables



Anoche inició en Mérida la colocación de los ductos en donde serán reubicados los cables de energía eléctrica, telefonía y televisión por cable que actualmente invaden las calles del Centro Histórico.
Los trabajos iniciaron en la esquina de las calles 61 y 64 y llegaron casi hasta el cruce con la 62, abriendo zanjas con maquinaria pesada.
Como se ha informado, en enero comenzará a ser retirado el exceso de postes que obstaculiza el tránsito de peatones, junto con las marañas de cables y transformadores que afean los edificios con valor arquitectónico.
Para ello se necesita comenzar a colocar los ductos que albergarán las líneas, en preparación de los trabajos de cableado subterráneo que comenzará en aproximadamente tres semanas, junto con la creación de calles de concreto estampado y las banquetas prefabricadas.
El Gobierno del Estado comenzó la excavación de zanjas sobre el pavimento de la calle 61 por 62 y 64, que durante seis horas estuvo ocupada por personal y maquinaria pesada, y cerrada al tráfico vehicular.
Los trabajos se realizan durante la noche para afectar lo menos posible a los comercios, peatones y automovilistas. El horario previsto para estas labores es de 11 de la noche a cinco de la mañana.

TRABAJO A LA PAR

Durante este tiempo, personal de la Secretaría de Obras Públicas, la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de Yucatán (Japay) y el Instituto de Antropología e Historia (INAH) trabajan de manera coordinada para supervisar la excavación.
También existe coordinación con las empresas Teléfonos de México, Comisión Federal de Electricidad y de televisión por cable.
Los trabajos consisten en la excavación de una zanja de 70 cms. de ancho con maquinaria –ida y vuelta-, tras la cual una retroexcavadora retira el exceso de tierra y detrás de esta última avanza una cuadrilla de obreros colocando los ductos plásticos, enterrándolos y cubriendo nuevamente la superficie al nivel de la calle.
Un arqueólogo del INAH revisa la zanja que se va abriendo, en búsqueda de posibles elementos o infraestructura con valor histórico ocultos bajo las calles.
En tanto personal de la Japay está atento a la aparición de tomas domiciliarias que resulten cortadas por la maquinaria. Debido a la antigüedad de la red de agua potable en el centro de Mérida, en algunos casos se carece de planos con todas las ubicaciones de tuberías.
En caso de suceder este imprevisto, personal de la dependencia espera que avance la máquina y de inmediato realiza una reconexión provisional en el punto donde fue cortada la toma para restablecer el flujo de la tubería principal y evitar que los predios se queden sin servicio.
Se prevé trabajar una cuadra a la vez cada noche. Es una labor coordinada entre maquinaria y personal para que, en cuestión de unas horas, el trabajo esté completado y a las cinco de la mañana la calle esté nuevamente transitable para los automotores.
Hoy por la noche se tiene previsto realizar este trabajo sobre la calle 63 por 62 y 64, entre la iglesia de Monjas y la Plaza Grande, de modo que se sugiere a los guiadores tomar previsiones por el cierre temporal de este tramo.

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