Este año la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente ha invertido aproximadamente 900 mil pesos para conservación, restauración y aprovechamiento de humedales costeros del Estado, teniendo como tarea principal acondicionamiento del suelo para la reforestación del manglar en dos hectáreas.
Entre las tareas que se han realizado para la conservación de humedales, está el desazolve de 15 manantiales, acondicionamiento de suelos para reforestación, producción en vivero comunitario de 27 mil plántulas de manglar, con lo se ha generado 11 mil 180 jornales en beneficio de 56 mujeres y 38 hombres de las localidades de Telchac Puerto y Chabihau.
Entre la importancia que traen los humedales costeros, esta que es un habitad natural para especies de la vida silvestre, refugio de aves marinas migratorias y endémicas, zona de transición y amortiguamiento entre los sistemas terrestres y marinos, barrera natural de protección que contiene la erosión y mareas.
Además de ser zonas de pesca ribereña y cultural, cuerpo receptor de aguas continentales, reciben y procesan nutrientes, capturan y precipitan sólidos en suspensión y actúan de filtro biológico, y también son zonas de protección y refugio de embarcaciones ante condiciones climáticas adversas, e incluso zonas de descanso, recreación y disfrute del paisaje.
En este marzo del presente año, se decreto que la reserva estatal de ciénagas y manglares de la costa norte de Yucatán ascendía a 54 mil 776.72 hectáreas, con lo que se protege la totalidad de este vital ecosistema y sus servicios en el Estado.
Entre las tareas que se han realizado para la conservación de humedales, está el desazolve de 15 manantiales, acondicionamiento de suelos para reforestación, producción en vivero comunitario de 27 mil plántulas de manglar, con lo se ha generado 11 mil 180 jornales en beneficio de 56 mujeres y 38 hombres de las localidades de Telchac Puerto y Chabihau.
Entre la importancia que traen los humedales costeros, esta que es un habitad natural para especies de la vida silvestre, refugio de aves marinas migratorias y endémicas, zona de transición y amortiguamiento entre los sistemas terrestres y marinos, barrera natural de protección que contiene la erosión y mareas.
Además de ser zonas de pesca ribereña y cultural, cuerpo receptor de aguas continentales, reciben y procesan nutrientes, capturan y precipitan sólidos en suspensión y actúan de filtro biológico, y también son zonas de protección y refugio de embarcaciones ante condiciones climáticas adversas, e incluso zonas de descanso, recreación y disfrute del paisaje.
En este marzo del presente año, se decreto que la reserva estatal de ciénagas y manglares de la costa norte de Yucatán ascendía a 54 mil 776.72 hectáreas, con lo que se protege la totalidad de este vital ecosistema y sus servicios en el Estado.
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