jueves, 11 de noviembre de 2010

EL PRI PROPONE REFORMA CONSTITUCIONAL PARA AUTONOMÍA DE ÓRGANOS REGULADORES, EN EL SENADO

En la sesión celebrada este día, el Grupo Parlamentario del PRI en el Senado de la República propuso reformar la constitución para fortalecer la autonomía de órganos reguladores, como es el caso de COFETEL, informó el legislador yucateco Cleominio Zoreda.
Para esto, la iniciativa presentada plantea modificaciones a nivel constitucional para que el Senado ratifique los nombramientos que el Presidente de la República haga de los funcionarios que integren estos organismos.
El Senador Cleominio Zoreda, como uno de los promoventes de la iniciativa, expresó que una de las principales motivaciones se relaciona con las transformaciones económicas, sociales y políticas que ha tenido el Estado mexicano en las últimas décadas, a través de las cuales el Estado pasó de ser dueño y administrador de empresas a regulador e impulsor de la economía. Estos cambios han exigido ajustes a la forma en que se procuran los equilibrios entre los diversos sectores de la sociedad, con el fin de fomentar la certidumbre jurídica, la eficiencia económica y el crecimiento económico con justicia; en otras palabras, cambios que favorezcan un ambiente propio para la inversión y la creación de empleos.
Entre los temas innovadores que propone la reforma, comentó el legislador yucateco, se contempla denominar como organismos descentralizados autónomos, a aquellos órganos desconcentrados que tengan dentro de su objeto la regulación y el fomento de actividades económicas, como una nueva figura de organización de la administración pública paraestatal.
Por otra parte, el legislador Zoreda explicó que la iniciativa presentada hoy en el Senado por su grupo parlamentario del PRI, es complementaria de la presentada por los senadores priístas el pasado martes, la cual de manera general tiene por objeto que los órganos reguladores formen parte de la administración pública federal, dotarlos de autonomía para emitir sus resoluciones respecto del Titular del Ejecutivo y de los secretarios de Estado; con el propósito de que exista un equilibrio de poderes en el nombramiento de los funcionarios que los integran, que el Poder Legislativo intervenga en el nombramiento de los principales servidores públicos del organismo, y por último, que los organismos sean dirigidos por instancias colegiadas.

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