La Secretaría de Educación capacitará a mil 400 profesores de Educación Física a fin de que tengan más elementos sobre la obesidad, desde su impacto en la salud personal y social, hasta la detección oportuna y su diagnóstico.
La capacitación se realizará durante tres días a partir de este miércoles, en cinco sedes; tres de ellas en Mérida y las restantes en Ticul y Valladolid, informó Alberto Alcocer, asesor del Programa Integral de Atención a la Obesidad del Estado de Yucatán (PIAOY).
El objetivo es que los profesores, en los niveles de Preescolar, Primaria y Secundaria, conozcan más sobre la obesidad y sobre aspectos de educación para la salud y orientación alimentaria, añadió el especialista.
También conocerán el Sistema de Información y Captura de Obesidad de Yucatán (SICOY), una herramienta informática diseñada para elaborar los reportes del estado general de salud de los alumnos.
Durante septiembre, los profesores recibirán sus equipos de medición y las herramientas educativas que les permitirán implementar las acciones de prevención y detección en todas las escuelas del Estado.
La información obtenida en las detecciones servirá para canalizar a los alumnos que lo requieran a la Unidad Cardiometabólica de la Universidad Autónoma de Yucatán y a los Centros de Ejercicio Terapéutico para la Obesidad (CETOS), además de que permitirá conocer factores específicos del problema de la obesidad infantil en el Estado.
El coordinador del PIAOY de la Dirección de Educación Física, Jorge Calderón Rodríguez, explicó que en este ciclo escolar alrededor de 700 escuelas primarias y secundarias contarán con dos sesiones de Educación Física a la semana, en las que se aplicará un programa con actividades específicas para combatir la obesidad.
Recordó que durante el ciclo escolar 2010-2011 se realizó la prueba piloto del PIAOY en 96 escuelas de Educación Básica y se instalaron 45 CETOS, con resultados muy positivos.
En este contexto, unos 15 mil alumnos participaron en pruebas de detección de obesidad, de los cuales 250 fueron canalizados a los CETOS, donde realizaron ejercicio terapéutico basado en el trabajo de fuerza, tres días a la semana.
Calderón Rodríguez dijo que aunque se esperaba cierta resistencia a participar en las sesiones de ejercicio a contraturno en los CETOS, ocurrió lo contrario. “Hubo maestros e incluso alumnos que no presentaron obesidad que se ofrecieron voluntariamente a asistir”.
La capacitación se realizará durante tres días a partir de este miércoles, en cinco sedes; tres de ellas en Mérida y las restantes en Ticul y Valladolid, informó Alberto Alcocer, asesor del Programa Integral de Atención a la Obesidad del Estado de Yucatán (PIAOY).
El objetivo es que los profesores, en los niveles de Preescolar, Primaria y Secundaria, conozcan más sobre la obesidad y sobre aspectos de educación para la salud y orientación alimentaria, añadió el especialista.
También conocerán el Sistema de Información y Captura de Obesidad de Yucatán (SICOY), una herramienta informática diseñada para elaborar los reportes del estado general de salud de los alumnos.
Durante septiembre, los profesores recibirán sus equipos de medición y las herramientas educativas que les permitirán implementar las acciones de prevención y detección en todas las escuelas del Estado.
La información obtenida en las detecciones servirá para canalizar a los alumnos que lo requieran a la Unidad Cardiometabólica de la Universidad Autónoma de Yucatán y a los Centros de Ejercicio Terapéutico para la Obesidad (CETOS), además de que permitirá conocer factores específicos del problema de la obesidad infantil en el Estado.
El coordinador del PIAOY de la Dirección de Educación Física, Jorge Calderón Rodríguez, explicó que en este ciclo escolar alrededor de 700 escuelas primarias y secundarias contarán con dos sesiones de Educación Física a la semana, en las que se aplicará un programa con actividades específicas para combatir la obesidad.
Recordó que durante el ciclo escolar 2010-2011 se realizó la prueba piloto del PIAOY en 96 escuelas de Educación Básica y se instalaron 45 CETOS, con resultados muy positivos.
En este contexto, unos 15 mil alumnos participaron en pruebas de detección de obesidad, de los cuales 250 fueron canalizados a los CETOS, donde realizaron ejercicio terapéutico basado en el trabajo de fuerza, tres días a la semana.
Calderón Rodríguez dijo que aunque se esperaba cierta resistencia a participar en las sesiones de ejercicio a contraturno en los CETOS, ocurrió lo contrario. “Hubo maestros e incluso alumnos que no presentaron obesidad que se ofrecieron voluntariamente a asistir”.
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